viernes, 4 de septiembre de 2009

Las Relaciones de Poder en los Espacios de Trabajo

"Las Relaciones de Poder en los Espacios de Trabajo"

La posición que ocupan las personas dentro de los espacios de trabajo según Ricardo Conteras Soto, están íntimamente relacionada con el poder que él o ella poseen. De manera genérica, el poder es la capacidad para actuar de acuerdo a la obtención de los propósitos e intereses de cada uno, la capacidad de intervenir en la trayectoria de los acontecimientos y de afectar los resultados.

Así que, al ejercer el poder, las personas emplean los recursos que tienen a su alrededor; es decir, los medios que les permiten alcanzar sus objetivos e intereses de manera efectiva. De ahí que, mediante la acumulación de los recursos que pueden ser de varios tipos, las personas pueden aumentar su poder, ya que los recursos pueden acumularse de manera personalmente, por relaciones política o por una segunda personas que interviene en la misma y que de hecho constituyen una importante plataforma para el ejercicio del poder. (Thompson, 1998).

En este sentido, las personas que ocupan posiciones dominantes en grandes instituciones pueden contar con inmensos recursos a su disposición, lo que les permite tomar decisiones y perseguir objetivos que tienen implicaciones con intereses personales.

De esta manera, la relación se da dentro del sistema, al contextualizar los enlaces de esas relaciones, pero se observan, como problemas de relación humana, problemas de comunicación, problemas de interacción, no como un problema de relación de poder.

Las relaciones de poder, no permiten descomponer los trazos de tensión en las relaciones de fuerza existente en la institución, principalmente aquellas relaciones de poder dominante.
Los estilos de mando en la actualidad, varían de acuerdo, a quien ejerce el mando. Históricamente se ha creído, que las mujeres cuando ejercen el mando, las relaciones de poder resultan ser mas fuerte, se sabe que esto se debe a que la cultura en diferentes países, le ha dado el poder a los hombres, diciéndole a la sociedad, que ellos nacieron para mandar, para ejercer el poder, por lo que, cuando a las mujeres se le confiere la oportunidad de mandar, muchas de ellas actúan duramente tanto con sus homólogas como con los hombres.

Esta manera de las mujeres ejercer el poder, es posible que se deba a que piensan que de ser flexible no serán respetadas como los hombres, o que su puesto de mando pase a otra persona ya sea hombre o mujer si tiene mayor conocimiento de lo que se ejerce.

En este sentido, es que hay que reflexionar, ya que como seres humanos, las personas tienen el don de comprensión, comunicación, análisis, búsqueda de estrategias y soluciones, que le permite relacionarse con las demás personas tanto en sus hogares, su comunidad, y en su espacio de trabajo, sin la necesidad de ejercer un poder que conlleve a la violencia y de lo contrario, preparada siempre a solucionar los conflictos que se presenten.